Luego de innumerables reclamos de los vecinos de la zona aledaña al lugar, el Municipio procedió este fin de semana pasado (domingo 20 de enero) a efectuar la clausura del local Bardearte, por incumplir la normativa provincial Nº 14.050, conocida como la ley de nocturnidad.

Esta disposición rige desde fines del 2009, regulando la actividad en lugares de esparcimiento nocturno (al aire libre o cerrados), poniendo énfasis en la presencia de menores, en los horarios de apertura y cierre de los mismos, venta de alcohol, volumen de la música, y otros ítems relacionados con su funcionamiento.

Recordemos que se trata de una cuestión que parece no tener una solución razonable, donde se cruzan los derechos de los vecinos de descansar y, de los que buscan disfrutar de un momento de diversión en nuestra ciudad.

Las quejas vecinales abarcan no sólo la madrugada de los sábados y domingos, sino además la de los viernes, ya que los jueves el local en cuestión también funciona.

Su ubicación en Tormey y Helguera, abarca un amplio sector hacia Fuerte Federación y hacia las calles Paso, Sarmiento, Frías, Mármol, Castelli, en cuanto al alcance del volumen de la música que indican los vecinos.

Y en los últimos tiempos han sido frecuentes los incidentes a la salida del local, motivando la intervención policial, con heridos de arma blanca en uno de los más recientes disturbios.

Habrá que observar qué consecuencias tendrá esta intervención municipal en cuanto a la mejora de la calidad de vida del vecindario, o si todo seguirá igual.