Su tratamiento se planteó en el marco de la tercera reunión del año del Consejo Municipal de Personas con Discapacidad que se llevó a cabo este viernes 3 de mayo desde las 14 horas en la sede del área municipal de Promoción Social con la presencia del dirigente rotario, Jorge Zunino y los concejales Mónica Almar, Alejandra Sábato, Carina Airet y Nicolás Scardino.

La directora del área, Daniela Amichetti, puso previamente la iniciativa en conocimiento del intendente Claudio Rossi quien le brindó su completo respaldo, poniendo a su disposición la disponibilidad de los estamentos municipales necesarios para plasmarla en un proyecto de ordenanza que será enviado oportunamente al Concejo Deliberante.

Los espacios públicos a intervenir con las obras inclusivas se definieron en esta reunión del viernes con la participación de todos los concurrentes del organismo, recordando que las convocatorias a estos encuentros mensuales son abiertas a toda la población.

Luego de analizar diferentes opciones que se ya se habían puesto a consideración en la reunión anterior del mes de abril, se optó por las plazas España y Rivadavia.

Sobre estos lugares la secretaria municipal de obras y servicios públicos ya estuvo tomando medidas y recabando datos para esbozar los primeros croquis que van a resultar de utilidad para la elaboración de un presupuesto que será puesto a consideración de la comisión del Rotary Club que definirá luego si puede cubrir las intervenciones en los dos espacios, o se comienza por uno de ellos, para después buscar la forma de financiar el otro.

El proyecto se elaboró resaltando que la inclusión no debe ser entendida como exclusión del otro, es decir el espacio inclusivo es para integrar a toda la comunidad, no solo para el uso de las personas con discapacidad, sino para compartir todos un mismo lugar sin compartimentos exclusivos.

Mientras tanto, el Consejo Municipal de Personas con Discapacidad busca intensificar sus acciones, teniendo como objetivo la toma de conciencia de la comunidad sobre las dificultades que afrontan a diario los vecinos con capacidades diferentes en su vida en sociedad, que se deben no solo a barreras arquitectónicas, sino también a los comportamientos o mejor dicho a los malos comportamientos de nosotros, los seres humanos falibles.