Así sucedió este fin de semana con la cena en el Club de los Abuelos para ayudar al niño Nahuel Tolay y su familia con los gastos que su enfermedad le ocasiona.
Esta cena fue exitosa en ese sentido, y el grupo que la organizó en un gran gesto, entregó el pan y las tortas que no se consumieron al Nuevo Club Juventud, para que preparen las meriendas de la gran cantidad de niños que concurren a su escuelita de fútbol.
Como dijo el gran Fito Páez, “¿quién dijo que todo está perdido?”, si Rojas viene a ofrecer su corazón.