Las entidades bancarias abrirán desde el viernes 3 al martes 7 de abril para atender sólo el pago de estas prestaciones.

Sólo podrán concurrir los jubilados o sus apoderados y los beneficiarios de asignaciones de la seguridad social, en especial los que no tienen tarjeta de débito, para que puedan cobrar sus haberes.

La decisión fue tomada en una reunión entre los presidentes del Banco Central de la República Argentina (BCRA) y del Banco Nación, Miguel Pesce y Eduardo Hecker, respectivamente, y el secretario general de la Asociación Bancaria, Sergio Palazzo.

"Las sucursales sólo se abrirán para pagar los beneficios de la seguridad social, además de realizar tareas internas ya previstas y que se venían realizando", informó el gremio de Palazzo en un comunicado.

Se cumplirán las normas de seguridad impuestas por el Gobierno como mantener la distancia y hacer cola fuera de los bancos.

Con ese objetivo las entidades van a abrir un "registro de voluntarios" entre sus empleados para cubrir estas actividades hasta el jueves a la mañana y, en caso de no cubrir la dotación necesaria, "convocarán a los recursos mínimos indispensables para tal fin", sin incluir a personas de riesgo y quienes tengan hijos a su cuidado por la suspensión de las clases.

Durante estos días de apertura las sucursales bancarias admitirán a personas "con las distancias de seguridad previstas en la resolución sanitaria" de modo que "el resto deberá realizar la fila fuera de la entidad bancaria".

Una vez finalizado el horario de atención al público se orientará las filas hacia los cajeros automáticos, luego de una interrupción para cargarlos.