En un acto de audacia, uno o más delincuentes entraron a la llamada Casa Cural, donde viven los religiosos que ejercen su sacerdocio en nuestra ciudad, y se llevaron una suma que oscilaría entre los 30 y 40 mil pesos.

Solo sustrajeron los billetes, por lo que se especula con que los delincuentes contaban con alguna información previa y también que conocían el lugar.

En ese camino están los investigadores del hecho ilícito.

Una reflexión para cerrar la información: este es otro delito que sucede en la zona céntrica, que desde hace diez días esta superpoblada de agentes de la Policía Local. Con lo cual no siempre el simple aumento de efectivos de seguridad, es útil para prevenir los robos. Trabaje doctor Núñez, no hay otro secreto.