Este sábado a partir de las 15 dará comienzo este Festival de Cultura, organizado por la provincia de Buenos Aires, que como se dice popularmente, con estos espectáculos, tira la casa por la ventana.

Sin ánimo de criticar como algunos “desubicados” ciudadanos, es evidente que existe presupuesto, y si no es así, estarán haciendo funcionar la máquina de Ciccone Calcográfica con billetes para todas y todos, emulando las mejores épocas de Cristina.

Ya que estos hechos marcan la naturaleza de nosotros, los seres humanos, que desde que el mundo es mundo vivimos en permanente contradicción. Afirmamos algo con palabras en forma contundente y, cuando nos toca actuar, hacemos todo lo contrario de lo que dijimos antes. O mejor dicho, reprobamos una situación hasta casi llegar al insulto, y luego hacemos exactamente lo mismo.

Y aquí se replica esta situación con la organización de estos eventos que quienes gobiernan actualmente antes criticaban. Argumentaban que con los pagos de elevados honorarios a los artistas participantes, se coaptaba su fidelidad a la causa política.

Ahora, ya en el poder, lo ejercen según sus conveniencias. Olvidando sin ponerse colorados todo lo que habían juzgado que estaba mal.

Pero, hablando de estos espectáculos, lo hacen mejor, con el agregado del glamour PRO, solo PRO, con el sello PRO, a todo lujo. Y remarcamos PRO, porque en este Gobierno ya no existen radicales,  son todas personas convertidas$ al PRO. Nadie puede afirmar seriamente que los ideales del radicalismo tienen algún punto en común con el PRO.

Y para cerrar, dejando de lado las pálidas por este sábado y domingo, y consagrando la hipocresía que todos profesamos, ahí estaremos, sacándole el jugo a todos los millones de pesos que pasaran delante de nuestras narices, que estarán distraídas con el parfum francés de Patricia Sosa y Gra Borges. Para Airbag estamos grandes.

Argentina. Pan y circo. Vermú con papas fritas y good show.