En la mañana de este miércoles 15 de noviembre, una cuadrilla de Clyfer  realizaba trabajos consistentes en la intervención de algunas bocacalles, que son necesarios para cuando la empresa encargada del reasfaltado retome las tareas suspendidas hace casi dos meses.

Esto sucederá de acuerdo a trascendidos entre el jueves y el viernes de esta semana.

Recordemos que quedan pendientes tres cuadras desde Paso a Dorrego y, los vecinos ya estaban dejando saber su fastidio por esta realidad.

No obstante el tema principal que la mayoría reclama es el arreglo de las veredas que fueron rotas al construir el nuevo cordón cuneta. La planificación original hablaba de intervenir en alrededor de quince centímetros, pero en muchos casos, quizás por las raíces de los arboles retirados, el sector afectado fue más amplio.

Hasta el momento los reclamos no han tenido respuesta favorable, por lo cual habrá que aguardar que culmine el reasfaltado y ver qué actitud toma el Gobierno  Municipal.

De acuerdo a lo informado en ocasión de comenzar la obra, la empresa encargada de reparar las veredas seria la misma que había construido el cordón y que, actualmente está realizando obras en la calle Azara en Barrio Progreso.