El Departamento de Recursos Humanos de cualquier Institución es clave para garantizar que cada integrante pueda desarrollar sus virtudes en beneficio del conjunto, haciendo que desde el lugar que ocupen tengan plena conciencia que forman parte de un equipo y como consecuencia de ello su buen o mal desempeño va a afectar la totalidad de la organización.
Y para eso hace falta la contratación de un profesional idóneo y activo, que recorra continuamente todas las áreas de trabajo y se tome su tiempo para ir conociendo a cada empleado y hallarle el espacio donde pueda desenvolverse de acuerdo a sus aptitudes.
Y ese no es el caso de la Municipalidad de Rojas que ha contratado un verdadero mercenario que degrada y corrompe la tarea que debe tener esta clase de profesionales.
El actual director de Recursos Humanos se llama Enrique Camacho, viene de la ciudad de Pergamino, y se desconocen los motivos por los cuales se relaciona con nuestro intendente, ya que solo un buen amigo te rescata de un lugar donde no iba a encontrar más trabajo en su profesión, puesto que lo habían echado de dos Empresas muy conocidas, y por motivos relacionados con manejo de dinero. Para completar también registra denuncias por estafa.
Con todos esos antecedentes, no resulta extraño que tenga conflictos con los empleados del Municipio. En este caso en particular la victima ha sido una enfermera que esta con un problema de salud hace ya un tiempo, y viene reclamando la conformación de la junta médica como uno de los últimos pasos para certificar su incapacidad.
Luego de atenderla siempre de muy mala manera, hace una semana le informo que la junta se había realizado y dejaron constancia que ella no concurrió, firmando el acta los doctores Navarro, Pertierra y Bavio. Cuando la damnificada le dice que nadie la había notificado, este señor la insulta, la amenaza con dejar de pagarle el sueldo y literalmente le dice que no le rompa más las pelot…… ,y que si al se le antoja la hecha ya que tiene todo el apoyo de Rossi. Todo esto fue grabado por la empleada, quien nos hizo escuchar los audios, pero no nos autorizó a hacerlos públicos, ya que teme por las represalias que esta bestia pueda tomar.
Luego se puso en contacto con el doctor Navarro, a quien le reclamo la participación de un traumatólogo, ya su problema está en la movilidad de sus piernas. Y este médico en su carácter de facultativo laboral del municipio en un acto de cobardía intento sacarse el tema de encima, haciendo responsable por todo a los empleados del área de Personal del Hospital, Liz Clark y Hernán Forgues, quienes no tuvieron otra opción que reconocerle a la trabajadora que no la habían notificado y que le armarían una nueva Junta.
Ante todos estos inconvenientes que está sufriendo, fue que decidió hacerlo público, como una forma de protegerse de una futura represalia de parte de este oscuro personaje que tienen que sufrir todos los empleados municipales.
¿El Sindicato de Municipales? Bien, gracias…
