El Municipio de Rojas, a través de la Dirección de Tránsito y en conjunto con la policía, realizó un gran despliegue para detener las motos ruidosas, las picadas y a quienes practican maniobras de alto riesgo.
Fue así como lograron secuestrar varios vehículos. Algunos conductores pudieron esquivar los dispositivos de control, aunque estarían identificados. No se descartan allanamientos para dar con esas motos.
Estas acciones se enmarcan en los reiterados pedidos de la gente por ruidos molestos y maniobras peligrosas en la vía pública.