La huelga general dispuesta en conjunto por la CGT y las dos CTA, no tuvo mayor acatamiento en nuestra ciudad.

La actividad comercial fue absolutamente normal, con la diferencia de que no hubo actividad bancaria y esta ha sido la más notoria que no ha funcionado. Esto hizo que los lugares de pago de servicios relacionados con el sistema Bapro no pudieran operar.

Tampoco hubo movimiento en Clyfer y el Molino Cabodi, en este caso tal vez relacionado con el paro del transporte que afectó también a la cerealeras.

La docencia acató la medida en forma dispar, ya que la mayoría dictó clases, excepto algunos cursos, y donde sí se cumplió casi totalmente fue en la ENSNA.

En el Municipio funciono a pleno, con la excepción de las medidas iniciadas este miércoles por los afiliados a ATE, que se sintió mayormente en el Hospital y en el Corralón.

Las oficinas de ANSeS, PAMI, IOMA y Registro del Automotor, desarrollaron sus habituales operatorias.

Asimismo, los supermercados y las casas de electrodomésticos también abrieron sus puertas.

En definitiva, en nuestra ciudad, la medida la cumplieron las entidades bancarias, Clyfer, Molinos Cabodi, el transporte y una parte del sector docente.  Para el resto de la ciudadanía un día más de trabajo y rutina.

El paro no va a cambiar la realidad de nosotros, los rojenses y tampoco la del resto del país. Para lograrlo tenemos las urnas cada dos años.