Los trabajadores de los cementerios municipales tanto del central como el del oeste de Junín denuncian que tanto al jefe comunal Pablo Petrecca como al Sindicato de los Trabajadores Municipales conducido por el dirigente sindical Saudan Gabriel, porque trabajan en las peores condiciones de seguridad e higiene, de las que debería velar tanto la Secretaría de Obras Públicas y su contralor que le corresponde al gremio de Saudan ya que tiene a su secretario de seguridad e higiene, Facundo Camilo, hijo del secretario adjunto Claudio Camilo, quien está en todos los puestos claves para controlar y negociar espuriamente en detrimentos de la salud y seguridad de los trabajadores, es decir, está la gran familia sindical con sus tentáculos políticos entregado a las mieles del gobierno local.

En el cementerio central los trabajadores de campo no tienen un espacio físico ni edilicio a donde puedan estar no hay vestuarios para cambiarse la ropa de trabajo ni duchas para bañarse, no le dan la ropa adecuada que se requiere para hacer la labor correspondiente con sus respectivas seguridades tampoco le dan los zapatos reglamentarios para ese tipo de tareas como los tipos pamperos de símil cuero tipo bota con suela de goma especial y punteras de acero, las oficinas de la administración está en estado calamitoso y llenas de humedad, los techos se llueve en todos los rincones habiendo computadoras y zapatillas y caja de enfunches con energía eléctrica ante cualquier posibilidad de gotera pueden quedar electrificados más con las paredes rotas y la humedad.

En el otro cementerio municipal es el llamado del oeste, los trabajadores también con los mismos dramas: la ropa inadecuada ya que el Municipio no le hace entrega como tiene que hacer realmente de zapatos y botas de trabajo, trabajan con zapatillas comunes de goma que ellos de compran, tampoco hay vestuarios y duchas. Los baños que hay son una desidia total, los inodoros no funcionan, los mingitorios rotos y así toda la infraestructura en estado de abandono total, las oficinas también con humedad y goteras en los techos, paredes en donde hay artefactos eléctricos corriendo un eminente peligro para la integridad, no tienen elevador para subir los cajones en la altura, se arreglan como pueden para no chocar con los familiares que vienen en estado de conmoción por la pérdida de un ser querido.

Sobre una nota escrita dirigida al intendente Municipal Pablo Petrecca por el Sindicato de Trabajadores Municipales fue toda una puesta en escena y fantochada que reza el siguiente texto: “Debido a la creciente ola de contagios por el Covid 19 en el país, de la cual la ciudad de Junín no está exenta, el Sindicato de los Trabajadores Municipales solicita que se armen a la brevedad las burbujas dentro de los grupos de tareas para comenzar a trabajar por turno, de esta manera estamos resguardando la integridad y salud de los compañeros trabajadores y a su vez salvaguardando al Municipio que pueda seguir operable diariamente”.

En otro orden y en consecuencia en los cementerios la infraestructura sobre las bóvedas, nichos y tumbas para el servicio de los vecinos para enterrar a sus seres queridos están en un estado de una película de terror y ultratumba en abandono total y una desidia inmoral todo muy tétrico por parte de la Secretaría de Obras Públicas dependiente del gobierno local que comanda Pablo Petrecca, ya hace un tiempo desde el bloque de concejales del Frente de Todos denunciaron este estado nefasto ya que la  ciudad se encuentra en Emergencia Funeraria, la cual fue prorrogada por la Ordenanza 7494 durante 2018.

Dicha Ordenanza, autoriza al Departamento Ejecutivo, por intermedio de la Secretaría de Obras Públicas, a que garantice la seguridad adecuada de los respectivos centros de sepultura. Precisamente corresponde al Municipio realizar medidas y acciones para que estos lugares dispongan de un espacio seguro, adecuado y se brinde un respetuoso tratamiento de los cuerpos que allí se encuentran, la inmediata intervención para el adecuado mantenimiento edilicio de los cementerios se haga efectivo lo estipulado por la Ordenanza 7494 y restaure el deterioro en paredes, techos, espacios de ingreso y circulación, ya que tal y como está representa un peligro para los transeúntes, los empleados y una falta de respeto hacia las familias que tienen sus seres queridos en el Cementerio Central y del Oeste.

Así están las cosas con todo este panorama ante los trabajadores de los cementerios y los vecinos que pagan con sus impuestos y aparte la cuota quinquenal para conservar a sus seres queridos en esos lugares, pero pareciera que tanto el intendente Petrecca como el sindicato liderado por Saudan negocian a espaldas de los trabajadores y ciudadanos mientras ellos se llenan los bolsillos de los erarios públicos siendo multipropietarios en inmuebles que tienen el partido de Junín en eso son más que coincidentes como reza el refrán popular “tienen más propiedades que la planta de aloe Vera”.