Estas últimas semanas han sido varios los hogares rojenses que han sufrido el corte del servicio por boletas impagas.

Y yendo a la letra fría y cruel de la normativa vigente, la empresa estaría actuando amparada por la misma.

Pero visto la angustiante situación económica que padece una gran parte de la población, se espera otra actitud de las empresas que brindan estos servicios básicos.

En muchos de los casos no existió un aviso de deuda que coloca en alerta al vecino sabiendo que dispone de un último plazo para evitar el corte.

Y en otros sólo se debía una factura, cuando en la práctica se ha hecho costumbre que se estaban tolerando hasta dos o tres según el caso en particular.

A todo esto se le agrega la sistematización del sistema (oficina virtual) que hace que todo se tenga que resolver de esa manera, recortando las posibilidades de acción de los empleados de la oficina local que bien vale aclarar, han actuado diligentemente para reponer servicios cortados de manera rápida una vez acreditados los pagos.

Los vecinos afectados están pidiendo nada más ni nada menos que la empresa Camuzzi muestre un rasgo de humanidad o sensibilidad social ante la difícil situación económica que están soportando con aumentos de precios generalizados.

Como así también estiman que las autoridades deberían involucrarse en la cuestión, gestionando ante la empresa, para que evalúe cada caso de manera individual, disponiendo de personal que los atienda personalmente  y sean escuchados.

Tarifazos que rozan el despojo combinados con la voracidad de empresas de servicios monopólicas, solo traen más padecimientos a familias que ven caer sus ingresos frente a la inflación.