También su vehículo habría sido dañado en el domicilio de una de sus hijas hace unos días.

La profesional tiene su domicilio sobre calle Hilario Lagos donde en la mañana de este lunes 22 de abril, aún se encontraban dos patrulleros de custodia por la denuncia que se radicara en la jornada del domingo.

Se sospecha de dos personas de sexo femenino que estarían vinculadas a un legajo de violencia de género que atiende en su consultorio del Hospital Municipal.

Y todo indica que estas mujeres habrían desarrollado una labor previa de vigilancia para llevar adelante estas intimidaciones, estudiando movimientos familiares y diversos domicilios, lo que tiene en un estado de máxima tensión no solo a la profesional en cuestión y su familia, sino también a sus vecinos que la socorrieron en primera instancia.

El hecho se produce en un contexto donde los casos de violencia de género y sus derivaciones en nuestro distrito vienen aumentando año a año, con reiteradas intervenciones policiales y judiciales.

Estaremos atentos a las novedades de esta angustiante situación.