El presidente del Concejo Deliberante de Junín, Patricio Fay, es también abogado de la delegación de Junín de la Fiscalía de Estado, donde cobra una suma aproximada de 80 mil pesos, por lo que esta siendo apuntado, sobre todo por pertenecer a un espacio que hizo hincapié en la necesidad de terminar con la multiplicidad de cargos e incompatibilidades en la gestión pública.

Ya desde la ex intendencia de Mario Meoni (Frente Renovador) que mantiene dos empleos estatales, porque hasta 2015 ocupó la Secretaría Legal y Técnica del municipio y ya era abogado en la entidad judicial, a que además ingresó de la mano de su padre que actualmente continúa siendo el delegado de la fiscalía en Junín.

En ese caso la incompatibilidad era grave o muy grave, no solo porque se supo que el funcionario cobraba los dos sueldos, sino porque en caso de haber un juicio contra el Estado, Fay sería quien iniciara la demanda por un lado y el encargado de contestarla por el otro.

Si con esto no alcanzara para desatar un verdadero escándalo, varios de los empleados del estudio jurídico particular del edil massista también prestan servicios en la Fiscalía de Estado, generando otra incompatibilidad de parte del funcionario.

De un momento a otro se espera que la situación recaiga en una denuncia penal contra Fay, pero lo que más llama la atención es la naturalidad con la que Sergio Massa, líder del Frente Renovador tomó el caso, atento que ese espacio fue pionero en reclamar una legislación que termine con la multiplicidad de cargos en la función pública.

Parece que en la política está más vigente que nunca aquel dicho popular que refiere "haz lo que yo digo, pero no lo que yo hago", y el massismo lo aplica a la perfección.