El agua caída en la madrugada y la mañana de este miércoles provocó que muchas de las calles de los barrios de nuestra ciudad, se tornen intransitables.
Bienvenido el asfalto para todos y todas, pero mientras tanto los vecinos que viven fuera de la zona urbana merecen una calidad de vida mejor, y de hace un tiempo a esta parte no se ha realizado ninguna tarea de mantenimiento, cuestión que se visualiza cuando llueve.
Y no necesariamente debe ser una precipitación abundante, basta con que como se dice vulgarmente; caigan “cuatro gotas locas” y a las botas y a los botes.
A media tarde recorrimos la mayor cantidad de barrios que nos fue posible, como Ramos – Evita – Santa Teresa – Unión - Progreso – Santa Rita – Belgrano –
Tal vez se pueda realizar un trabajo como el que aplicaron en las calles de Villa del Parque Cecir, con el rap que van recolectando de las calles que reasfaltan. O volver a emparejarlas con piedras. Pero indudablemente algo hay que hacer.
Y cuando estén arregladas, debería prevalecer la solidaridad entre vecinos y no permitir el tránsito pesado que arruina en una pasada cualquier arreglo hecho con toda buena voluntad.